PLATÓN (4). El alma: la areté (virtud) y la justicia. (Psicología, ética y política) *El significado de la palabra “alma” (psiché): proviene de un verbo que significa “respirar”, y eso es lo que se consideraba “alma” en los poemas homéricos (las fuentes escritas más antiguas en la cultura griega): un soplo de aire que es el principio del movimiento del cuerpo. *Las influencias órficas y pitagóricas: el alma es separable del cuerpo y puede vivir sin él: inmortalidad y transmigración (reencarnación) de las almas. Platón elabora su teoría del alma inspirado en estas influencias, y aunque su teoría del hombre resultará así dualista, detallará las relaciones entre alma y cuerpo, estableciendo distintas partes del alma, algunas de las cuales estarían más unidas al cuerpo. Esa teoría tripartita del alma (desarrollada en República) la establece analizando los distintos tipos de pensamientos que constituyen la psique, flujo de pensamientos que se hayan encerrados en un cuerpo-cárcel. . Alma apetitiva (o concupiscible): los pensamientos más estrechamente vinculados al cuerpo. Expresan sus necesidades (hambre, apetito sexual, descanso, defecación, etc.), los apetitos que, si no son satisfechos, afectarían gravemente al cuerpo. Esas tendencias serán consideradas “bajas” por la tradición cristiana, juicio que escandalizará a Nietzsche y será parte de su ataque a Sócrates, Platón y el cristianismo. Platón sitúa a esta parte del alma en el estómago. . Alma irascible (o volitiva –de voluntad-): las pasiones, que aunque afectan al cuerpo, no son imprescindibles para su existencia: amor, odio, alegría, tristeza, ira, compasión, etc. Platón la imagina en contacto con el corazón. . Alma inteligible (o racional): la que entiende e interpreta el mundo que nos rodea, mediante el lógos (lenguaje inteligente, racional). Esta parte del alma, la que contiene las ideas eternas (la idea de triángulo, por ejemplo, o la de bien...), es también eterna, es decir,