La decouverte de l amerique
Los últimos Habsburgos habían vivido de las glorias antiguas. El fin del siglo XVII marca al mismo tiempo el término del reinado de Carlos II (1665-1700) y el triunfo de Francia por la imposición de la dinastía borbónica. Reinó entonces Felipe V (1700-1746). La decadencia hispánica significa en América el aislacionismo, el separatismo de cada región, la falta de nuevos misioneros. Por el tratado de Utrecht (1713) España y Portugal no poseen ya el poder sobre los mares. Poco a poco Holanda e Inglaterra reemplazan al poder hispánico. Latinoamérica sintió profundamente esta decadencia hispánica, por cuanto fue su propia decadencia. Además la diversidad étnica da lugar al criollismo cuyo origen corre paralelo al desarrollo de las sociedades americanas desde el siglo XVII. Los criollos constituyen la oligarquía económica descendiente de los conquistadores-encomenderos del siglo XVI, poderosos mineros y ricos comerciantes. Ante la ausencia de nobleza peninsular en los territorios americanos, esta élite económica, añade durante el final del XVII y mediados del XVIII poder social e incluso político.
En este contexto podemos preguntarnos como las relaciones entre la Península y América van evolucionar. En una primera parte veremos la evolución de la América Hispana en el siglo de la Ilustración, y en una segunda parte veremos cómo esta evolución va a llegar a América hasta los inicios de la independencia.
I. América en el siglo de la Ilustración
Durante el siglo XVIII, la América Colonial llega a su momento de máximo esplendor. Su economía, íntimamente vinculada a la europea, la arrastra sin embargo a los conflictos del Viejo Mundo y la convierte en campo de batalla de las potencias que luchan por la hegemonía. Tras el duelo hispano ingles vendrá el anglo francés. Lo más significativo de la segunda mitad de esa centuria es, sin duda, la aparición de una nación en el continente, los Estados