Cuchillo

preparar una ensalada que te vas a chupar los dedos”, exclama con cara de pillín. Esa ensalada de aguacates y nueces y manzana que tanto le gusta. Así que yo me amanso porque soy idiota y, aunque refunfuñando, le ayudo a sacar los platos, la fruta, los cuchillos, y le ato a la espalda el delantal mientras él mantiene los brazos pomposamente estirados ante sí como si fuera un cirujano a punto de realizar una operación magistral a corazón abierto. Entonces él empieza a pelar los aguacates y yo, por hacer algo

una anciena de pelo blanco, se encontraba cosiendo en su cuarto cuando escuchó ruidos desusados en la casa. Se levantó para averiguar de qué se trataba, pero no alcanzó a salir, porque en la puerta tropezó de frente con une hombre que le puso un cuchillo en el cuello. - Silencio, puta, o te despacho de un solo corte _ la amenazó. - No es aquí, hijo. Las damas de la noche están el otro lado de la calle, donde tienen la música. - No te burles, esto es un asalto. - ¿Cómo dices ? – sonrió incrédula

de piel a raiz tanto los otres oyentes como el gitano comprendemos que no es el hijo del gitano sino de la luna . La tercera estrofa : * La tercera estrofa la venganza del marido gitano insistiendo en el sujeto del hondra. La visión del cuchillo muestra que el marido mata a su mujer, el Gitano no le deja oportunidad a su mujer de explicarse y el desenlace es brutal y trágico. Ultima estrofa : * En la ultima estrofa nos olvidamos de la pareja para figarros en el nino y la luna ,

de él cada vez más. A este momento, el suspense es como máximo y el lector es angustiado porque no sabe lo que va a pasar al hombre. Un indio agrede al hombre. El narrador presa de pánico, no puede correr pero siento la punta de un cuchillo en su espalda. El cuchillo nos sugiere la muerte, el desenlace trágico, el crimen. Hay pocas informaciones sobre los dos protagonistas. Del perseguidor sabemos que es un indio porque los “huaraches” identifican al perseguidor se trata de un indio. Del otro personaje

cristianos”. -El mundo 1 Los musulmanes niegan que agredieran a los agentes en la Mezquita de Córdoba Turistas que han declarado por el altercado en la Mezquita, al salir del juzgado. • Los implicados han negado que llevaran ningún cuchillo • Aseguran que el ambiente les llevó a orar • Hay ocho personas imputadas por desórdenes públicos Efe | Córdoba Actualizado viernes 02/04/2010 10:45 horas Los turistas musulmanes austríacos que el miércoles protagonizaron

|« Le grand Cuchillo était effondré dans un fauteuil de rotin, bras ballants jusqu'au sol, jambes étalées | | |et tête basculée sur la poitrine. Il était en costume de piste (mexicain à paillettes), et un de ses | | |fameux poignards était enfoncé dans sa poitrine, à hauteur du cœur. » | |la victime |le grand Cuchillo, « le meilleur lanceur

Tomé un cuchillo de la mesa junto al pan y la mantequilla. Sabía lo que tenía que hacer. Se lo clavé justo en el pecho y vi en el espejo frente a mí, mis ojos llenos de desenfreno y hambrientos de muerte. Justo después sentí como se acababa el aire en mis pulmones, como mi piel ardía de dolor. Mis piernas temblaron, mis rodillas cedieron y caí al suelo, impecable y frío. Mis ojos entreabiertos vieron por última vez en el reflejo del espejo a un hombre que no quisieron reconocer, un cuchillo clavado

de él cada vez más. A este momento, el suspense es como máximo y el lector es angustiado porque no sabe lo que va a pasar al hombre. Un indio agrede al hombre. El narrador presa de pánico, no puede correr pero siento la punta de un cuchillo en su espalda. El cuchillo nos sugiere la muerte, el desenlace trágico, el crimen. Hay pocas informaciones sobre los dos protagonistas. Del perseguidor sabemos que es un indio porque los “huaraches” identifican al perseguidor se trata de un indio. Del otro personaje

¿Y si yo me convirtiera en pez luna? FIGURA DE PÁMPANOS. Yo me convertiría en cuchillo. FIGURA DE CASCABELES. (Dejando de danzar.) Pero ¿por qué?, ¿por qué me atormentas? ¿Cómo no vienes conmigo, si me amas, hasta donde yo te lleve? Si yo me convirtiera en pez luna, tú te convertirías en ola de mar, o en alga, y si quieres algo muy lejano, porque no desees besarme, tú te convertirías en luna llena, ¡pero en cuchillo! Te gozas en interrumpir mi danza. Y danzando es la única manera que tengo de amarte

preparar una enselada que te vas a chupar los dedos", exclama con cara de pillín. Esa enselada de aguacates y nueces y manzana que tanto le gusta. Así que yo me amanso porque soy idiota y, aunque refunfuñando, le ayudo a sacar los platos, la fruta, los cuchillos, y le alto a la espalda el delantal mientras él mantiene los brazos pomposamente estirados ante sí como si fuera un cirujano a punto de realizar una operación magistral a corazón abierto. Entonces él empieza a pelar los aguacates y yo, por hacer