Una aparición providencial
Queridísimos padres:
Ahora vivo modestísimamente. Aunque bien. Tengo un buen cuarto. Me cuesta 7 dólares a la semana. Luego la comida depende. Como en la cafetería del colegio John en la misma universidad por ¡55 céntimos! y muy buena comida. Otras veces cuando tengo más hambre me cuesta 75. Y cuando voy al centro de la ciudad y comemos con amigos me cuesta un dólar.
La ropa me cuesta enormemente. Cada lavado un dólar y medio o dos dólares. Por eso tengo tan gran cuidado con ella. No me extralimito lo más mínimo. Claro es que me invitan mucho y en cambio yo tengo la suerte de no tener necesidad de invitar porque no tengo casa. Las comidas que hago consisten en: una sopa; un plato de carne con patatas, guisantes, remolachitas y salsas; un dulce o una tarta de manzanas, un vaso de té frío con limón para beber y café con leche o un vaso de leche. Todo por 55 o 60 centavos de dólares. Como bien. No necesito más.
De todas maneras, que papá no se olvide de mandarme en seguida el dinero correspondiente al mes para no quedarme colgado.
Adiós, queridísimos. Recibid besos y abrazos de vuestro hijo que no os olvida y os quiere.
Federico
Chers parents:
Maintenant, je vis très modeste. Bien bien. J'ai un bon trimestre. Il en coûte 7 $ par semaine. Alors la nourriture dépend. Comme dans la cafétéria de l'école John dans la même université pour 55 cents! et une excellente cuisine. D'autres fois, quand j'ai faim coûts plus moi 75. Et quand je vais au centre-ville et de manger avec des amis me coûte un dollar.
Les vêtements me coûte beaucoup. Chaque lavage d'un dollar et demi ou deux dollars. C'est pourquoi j'ai grand soin d'elle. J'ai dépassé le moins. Il est clair que beaucoup de m'inviter au lieu et j'ai la chance de ne pas avoir à poser parce que je n'ai pas de maison. Les aliments qui ne comprennent: un