Ensayo el viejo y el mar
Sonia Gutiérrez Martos 568015
Ensayo comparativo ¿Qué es lo que hace que el cazador sienta admiración por su presa? ¿Cómo esa lucha entre ambos, crea una convivencia que puede desembocar en simpatía y admiración? En este ensayo se compararán las dos obras: “Un viejo que leía novelas de amor” de Luis Sepúlveda, y “El viejo y el mar” de Ernest Hemingway. En la primera, el autor chileno nacido en 1949 nos muestra como el personaje principal se ve obligado a matar a una criatura que admira y respeta. De la misma manera, el viejo de la novela del estadounidense nacido en 1899, se siente identificado con el gran pez al que quiere atrapar. Es por eso que se tendrá como idea central la siguiente hipótesis: “Tanto en la novela de Sepúlveda como en la de Hemmingway, los personajes principales desarrollan un sentimiento de admiración y de respeto por sus presas y por la naturaleza.”
Luis Sepúlveda nos describe a un José Bolívar Proaño como un ser que respeta a su ecosistema. Sabe obtener beneficios de el, pero también conoce los límites. Venera el equilibrio que debe de haber entre la selva y el ser humano. Este equilibrio había sido mantenido hasta que llega un estadounidense que mata los cachorros de una tigrilla, haciendo que ésta se enfurezca y quiera tomar venganza con todos los humanos que encuentre a su paso. Pero José Bolívar no la culpa. Bien lo describe el autor: “ sin dejar de maldecir al gringo inaugurador de la tragedia, al alcalde, a los buscadores de oro, a todos los que emputecían la virginidad de su amazonía”. ( Sepúlveda 135). De la misma manera el personaje de “El viejo y el mar”, conoce y ama su entorno. “La mar”, es la manera en la que llama de manera cariñosa y poética al océano. Vemos como el viejo pesca para sobrevivir y no por eso deja de llamar a todos los peces “sus amigos”. Varias veces lo repite: “El pez también es mi amigo (…) Jamás he visto un pez así, ni he oído hablar de él. Pero tengo que matarlo.”