Certeza

do séc. XVI, a Europa encontrava-se desagregada e a igreja dividida: na Europa verificava-se uma grande instabilidade política e guerras e a igreja tinha sofrido uma quebra ideológica que se reflectiu no movimento da Reforma. Assim, aos tempos de certeza, racionalidade (positivismo humanista) sucederam tempos de dúvida, angústia e inquietação. A crise política da Itália acabou por atingir o seu centro, capital da religião cristã. Assim a igreja foi inevitavelmente afectada. Paralelamente, nos países

nacional, van a ser turbadores o, siguiendo las metáforas infernales, dantescos. Ya asoman los dos ismos tenaces, el fatalismo y el fanatismo. Parece que los acontecimientos otra vez se suceden como consecuencia de una ley inexorable, entre ridículas certezas y baile de esqueletos. En cuanto al fanatismo, habría que poner en las escuelas aquel pensamiento de Plutarco: «Preferiría que dijeran que no he existido a que crean que fui fanático». Que pasara el gobierno de unos individuos a otros, de un partido

galardon). H. núñez, 903: Asno malo, cabe casa aguija sin palo. CorreaS, 3072: «Asno malo, cabe casa aguija sin palo». «Quien en la enfermedad y en el peligro comenzare a suplicar y a rogar, es que no le duele el castigo de su delito, sino la certeza de su muerte cercana. Y no es digno de recibir un consuelo en la muerte, quien no pensó que él habría de morir»188 (3). Matiza Agustín en el libro Sobre la penitencia: «Aunque, efectivamente, el ladrón mereció el perdón al final a pesar de toda maldad

vez en cuando arrastrándose por la puerta grande y llegaba a Valle de noche, y se llevaba gente, especialmente doncellas, para comerlas en la cueva, hasta que Valle quedó arruinada y toda la gente murió o huyó. Lo que pasa allí ahora no lo sé con certeza, pero no creo que nadie viva hoy entre la Montaña y la orilla opuesta del Lago Largo. Los pocos de nosotros que estábamos fuera, y así nos salvamos, llorábamos a escondidas y maldecíamos a Smaug, y allí nos encontramos inesperadamente con mi padre