Este texto es un fragmento de la novela de Luis Sepúlveda que se titula Un viejo que leía novelas de amor. Este texto puede se compone de dos partes, la primera es El Idilio, el pueblo en que se pasa la historia y la segunda parte es el doctor Rubicundo Loachamín, un dentista ambulante y uno de los personajes principales.

El Idilio es el lugar donde se pasa la escena. Se sitúa en la parte amazónica del Ecuador. Hay pocos habitantes. Los habitantes tienen miedo de las enfermedades que hay aquí como la malaria. No hay muchas visitas porque la correspondencia entre El Idilio y el resto del país. “La gente esperaban la llegada del barco sin otras esperanzas que ver renovadas sus provisiones de sal, gas, cervezas y aguardiente” significa que no hay muchas causas para vivir en este lugar y que les condiciones de vidas son muy difíciles y que la esperanza es muy débil. En efecto la única visita que reciben es la del dentista y del empleados de Correos. En El Idilio hay también instalaciones petroleras del Coca.
La primera frase del texto “El cielo era una inflada panza de burro colgando amenazante a escasos palmos de las cabezas. El viento tibio y pegajoso barría algunas hojas sueltas y sacudía con violencia los bananos raquíticos” nos informan sobre la situación climática del Idilio.

Dos veces al año el doctor Rubicundo Loachamín viene al pueblo. Es un hombre muy popular en El Idilio, un hombre singular y extravagante. Es muy popular porque es un dentista y la gente del pueblo tiene une importancia muy grande para los dientes porque no quieren tener la malaria. “el dentista les limpiaba las encías de los últimos restos de dientes y enseguida les ordenaba hacer un buchón aguardiente” significa el dentista no está apreciaba por el gobierno y hace su oficio contra las autoridades.

Para concluir, podemos decir que en El Idilio no hay buenas condiciones de vida, no hay muchas personas que viven en este lugar y que la gente apreciaba mucho la visita del doctor