Jules
LA LUZ DE LA FE. Caravaggio nace en un época de grandes cambios. A nivel científico aparecen Galileo Galilei y Giordano Bruno que revolucionan la ciencia y parece entrar en contradicción con los dogmas religiosos. Francia y España atacan los Estados Pontificios que ha perdido ya influencia en el imperio germánico.. Se convoca el concilio de Trento para responder con una reforma interna de la Iglesia católica. El tema del cuadro, la duda de Tomas es recurrente para describir esta época (como la nuestra, donde la duda sobre la validez, vigencia y racionalidad de la fe nos sacude). Hoy como ayer ,vivir en esta sociedad produce perplejidad, dudas, crisis y miedos. Caravaggio representa Jesús aún con el sudario y con la lividez de la muerte, con el pecho hundido como un cuerpo inerte y sin respiración. 2000 años después y aún queda mucha oscuridad y muerte por vencer. Frente a esa época oscura, Caravaggio dibuja este cuadro con una luz débil pero directa sobre la escena. La luz nace de abajo (¿Una puerta abierta? ¿acaso el sepulcro que está aún abierto?). Esa luz y no sólo nuestros ojos, es lo que nos permite contemplar la escena. La Luz que alumbra y derrota la oscuridad, que da sentido, serenidad y esperanza a lo que vivimos.