Le vouvoiement espagnole
Nosotros no hablamos « mal » el castellano : hablamos « otro » castellano, que no, es lo mismo. Decimos « saco » a ala chaqueta, empleamos el « vos » en lugar de tú, acostumbramos emplear el « recién » sin participio pasado, pronunciamos (en Buenos Aires) el fonema « ll » como « y » no distinguimos entre la « z » y la « s »
Y qué? Sólo los viejos gramaticos siguen suponiendo que hay una lengua cristalizada, un dechado supremo al que deben ajustarse los hablantes vivan donde vivan. Y esta curiosa supercherí tiene tanto prestigio que cada cierto tiempo tenemos que soportar aquí la insolencia de cualquier extranjero que (en un castellano balbuceante y grosero) nos acuse, apenas desembarcado, de no hablar bien el castellano. Idea, calor, que le inyectó en alguna academia de Zurich o Londres un espaňol que sigue creyendo en el mito.
Del mismo modo, cada cierto tiempo, nos anuncian que el mejor inglés se habla en Oxford y el mejor espanol en Tolendo. Lo que implica algo así como un Origen Absoluto de Coordenadas semejante al que ansiosamente buscaban los fisicos anteriores a Einstein. La ciudad de Toledo representaria la Silla absoluta de la Lengua Castellana, y los pobres mortales que habitamos en otras partes del vasto imperio estariamos condenados a farfullar dialectos mas o menos